Asociación Animálaga En Animálaga cerramos el año en positivo porque acabamos el 2014 rescatando a Lola (así la hemos rebautizado). Lola es una perrita de no más de siete meses, que se encontraba en una lamentable situación de abandono por parte de su propietario (llevaba atada desde pequeña a una cadena de muy poca longitud y con escaso alimento). Tras recibir la información de la situación de la perra (gracias a Manolo S.), contactamos con el Colegio de Veterinarios de Málaga quien nos facilitó el proceso de denuncia con el Seprona. A Lola la rescatamos el miércoles 24 de Diciembre. El propio Seprona se encargó de ir a recogerla al domicilio del anterior propietario (en un pueblo de Málaga) y llevarla a la consulta de Emilio GªMonclús Del Castillo, veterinario y gerente del Grupo GMC VET GROUP, quien le hizo una revisión a fondo, la desparasitó y le proporcionó un complemento vitamínico muy completo, así como antibióticos. Lola hoy por hoy es una perrita muy feliz, que vive en el campo con animales de otras especies, come como una lima, ha recuperado su peso, el pelo y el brillo en él. Os dejamos fotos del antes y el después para que veáis la evolución. Gracias a Emilio por adoptarla y darle una vida mejor!!
PRIMER RESCATE CANINO DE ANIMÁLAGA
Y ahora, los agradecimientos: A Manolo S., por avisar de la situación de la perrita, y ofrecerse de testigo, en caso de Juicio (que no ha sido necesario). Al Colegio de Veterinarios de Málaga y en especial a Lisardo Morán, por facilitarnos la labor de contactar con el Seprona y darnos todo tipo de soporte, ademas nos ayudaran cubriendo los gastos del chip de identificación de Lola. Al Seprona, por su rápida actuación y procedimiento, ya que hemos comprobado personalmente su preocupación por el bienestar de los animales como profesionales y como personas. A Emilio García-Monclús, no solo por hacerle una revisión minuciosa a Lola y darle la medicación que necesitaba, sino también por acogerla. Y a todos los miembros de Animálaga, por la colaboración en la interposición de la denuncia y, además, por contribuir en la compra del collar nuevo de Lola, comida, vacunas, medicamentos, pasaporte e incluso el baño inicial. Lola forma parte ya de nuestras vidas. Como decía al principio, hemos acabado el año sabiendo que Lola va a estar bien cuidada y sabiendo cómo actuar para evitar que los animales sufran por culpa de las personas. Si hay que denunciar, se denuncia con todas sus consecuencias.
ANTES
DESPUÉS
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