¿Qué es la hiperplasia fibroadenomatosa mamaria felina?
La hiperplasia fibroadenomatosa mamaria felina (HFMF), también denominada fibroadenomatosis mamaria, hiperplasia fibroepitelial mamaria, hipertrofia mamaria benigna o displasia mamaria, se trata de una patología exclusiva de gatos que consiste en la proliferación no neoplásica más frecuente del tejido mamario de los felinos. Los animales se presentan en la clínica con un aumento del tamaño de las mamas desde caudal a craneal, generalmente afectando a las dos cadenas, cuyo tamaño puede variar desde 1 a 10cm; y se relaciona con la estimulación de la progesterona, ya sea inducida por el celo o por la administración exógena de progestágenos.
Las urgencias veterinarias suelen darse con mayor frecuencia en gatas jóvenes enteras, que pueden estar o no gestantes, aunque también se han reportado casos en machos que han recibido algún tipo de tratamiento con progestágenos.
Patogenia de la hiperplasia mamaria felina
La glándula mamaria posee receptores tanto para estrógenos como para progesterona; los estrógenos producidos en el ovario durante el celo se unen a sus receptores en la mama, lo cual induce la síntesis de receptores intracelulares de progesterona, este aumento de los receptores de progesterona hace a la glándula más sensible a la acción de esta hormona. A su vez, la progesterona induce la síntesis local de hormona del crecimiento (GnRH) y de insulin-like growth factor (IGF-1), lo que favorece el agrandamiento del tamaño de la glándula mamaria.
La enfermedad se presenta cuando existe una hipersensibilidad o respuesta anormal por parte de la glándula mamaria a la acción de estas hormonas.
Presentación clínica
Esta patología suele presentarse en hembras jóvenes después de su primer ciclo estral estén gestantes o no, o en animales tanto hembras como machos que hayan tenido tratamiento con progestágenos como medicación anticonceptiva, para corregir comportamientos o para tratar algunas dermatopatías.
La presentación típica es el aumento súbito del tamaño de las mamas (48-72h), que puede ser o no doloroso ya que en algunas ocasiones este aumento del tejido mamario puede dar lugar a ulceración de la piel.
No es habitual que la glándula mamaria presente secreción y el estado del animal suele ser bueno, aunque a veces pueden presentar dolor, fiebre y en ocasiones la instauración de infecciones secundarias debido a la alteración de la permeabilidad de la capa externa de la piel a causa de la distensión producida por este aumento del tamaño glandular.
Diagnóstico de la hiperplasia mamaria felina
El diagnóstico es fundamentalmente clínico teniendo en cuenta en la anamnesis la edad de la gata, si ha recibido o está recibiendo algún tipo de tratamiento con progestágenos y sobre todo descartar la gestación.
En citología realizada con Punción Aspiración con Aguja Fina (PAAF) podemos observar células epiteliales uniformes y células mesenquimatosas fusiformes asociadas a una abundante matriz extracelular de color rosa.
El diagnóstico definitivo se obtendría mediante la realización de toma de muestra y posterior biopsia para su estudio histopatológico, aunque esto en la mayoría de los casos está contraindicado debido a la mala cicatrización del tejido a causa de la inflamación.
El tratamiento de la hiperplasia fibroadenomatosa mamaria felina es la eliminación de la fuente de progesterona, aunque en casos leves puede haber resolución espontánea del cuadro sintomático sin tratamiento alguno. Los fármacos de elección son antiprogestágenos y antiprolactínicos, hay que tener en cuenta que ninguno de estos fármacos puede utilizarse durante la gestación por lo que es imprescindible descartar la misma antes de instaurar ningún tipo de tratamiento.
Como antiprogestágeno se usa la aglepristona a dosis de 15mg/kg en dos dosis separadas 24 horas, que actúa bloqueando los receptores de progesterona; y como antiprolactínico la cabergolina a dosis de 5mg/kg SID durante 5-10 días lo cual ayuda a reducir el tamaño y la congestión mamaria. No se recomienda el tratamiento prolongado ya que podremos inducir un nuevo ciclo estral.
Si la HFMF está producida por la administración de progestágenos exógenos, será necesario retirar el tratamiento por completo lo antes posible y si en 24-48 horas no revierte el proceso habrá que pautar tratamiento con algepristona igual que en el caso anterior.
En los casos de HFMF en hembras no preñadas se recomienda la ovariohisterectomía después de la resolución del proceso, ya que la cicatrización de la cirugía se verá comprometida debido al estado del tejido mamario.
Además según la sintomatología de animal, en ocasiones será necesario instaurar tratamiento con antiinflamatorios sistémicos, antibióticos o analgésicos, dependiendo de la severidad del proceso, como indicamos en el hospital veterinario.
Conclusiones sobre la hiperplasia
La hiperplasia fibroadenomatosa mamaria felina (HFMF) es un proceso de agrandamiento de las glándulas mamarias en gatas jóvenes de caracter benigno y aparición rápida, tras el celo o tras administración de progestágenos endógenos. Es por esto que es importante hacer una buena anamnesis para saber en qué momento de ciclo estral se encuentra y si ha habido posibilidad de monta por parte de un macho.
El diagnóstico es fundamentalmente clínico y en cuanto al tratamiento, éste está basado en antiprogestágenos y antiprolactínicos aunque en algunas ocasiones es necesaria la incorporación de antiinflamatorios, antibióticos o analgésicos dependiendo de la severidad del proceso.
En estos casos está indicada la realización de ovariohisterectomía una vez resuelto el proceso inflamatorio de la mama, aunque está descrito que las recidivas no son muy frecuentes. ¡Contacta!
Autora del artículo: Isabel Marina Fernández Gallego. Veterinaria en GMC Vet Group.
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GMC VET GROUP es un grupo dedicado a la medicina veterinaria en Málaga y provincia, dirigido por un profesional de prestigio como es el Dr. D. Emilio García-Monclús del Castillo.